Los agricultores familiares y las comunidades se han visto afectadas por diversas actividades económicas en las últimas décadas, tales como la agricultura comercial, la minería, el turismo, la extracción de hidrocarburos y madera, pero también por procesos de acaparamiento de tierras. Estos procesos van de la mano con cambios en las reglas de juego sobre el acceso a la tierra, el favorecimiento a la gran inversión y la desprotección de los agricultores familiares y comunidades.

El Observatorio monitorea estos procesos en sus diversas modalidades: ampliación de la frontera agrícola, concesiones mineras, concesiones de bosques, concesiones de hidrocarburos, entre los principales.